«La salud es el delicado balance en la armonía del cuerpo, mente y espíritu donde los problemas físicos y las distracciones mentales han desaparecido. «

—  Iyengar.

Hoy en día el Yoga es ya un viejo conocido dentro de la disciplina física que puedes practicar en casa o diferentes gimnasios o centros de fisioterapia. En este artículo repasaremos la historia del Yoga y como ha llegado hasta nosotros. Pero antes de nada debemos definir el significado de Yoga, ya que dependiendo de cómo se viva el yoga puede ser desde una filosofía de vida a una rutina física diaria. Y eso es lo fascinante de este arte milenario y la razón de que encaje tan bien para diferentes perfiles personales.

Definición de Yoga:

Si atendemos exclusivamente a la definición propuesta por la RAE nos encontraremos las siguientes definiciones:

• m. Conjunto de disciplinas físico-mentales originales de la India, destinadas a conseguir la perfección espiritual y la unión con lo absoluto.
• m. Conjunto de las prácticas modernas derivadas del yoga hindú y dirigidas a obtener mayor eficacia en el dominio del cuerpo y la concentración anímica.

Tanto una definición como la otra pueden servirnos, y, probablemente dependiendo de la espiritualidad o pragmatismo del lector de este artículo, cada uno se sentirá más cercano a una definición u otra.

Si lo pensamos bien, estas dos sencillas definiciones nos dan otro ejemplo de las distintas formas de pensar entre nuestro “occidente” (encarnado en la vieja Europa) y el “lejano y misterioso oriente” (en este caso la India) que siempre ha estado en el imaginario colectivo de los “occidentales”. El hecho de que el Yoga encaje tan bien dentro de ambas definiciones no hace más que mostrarnos el éxito de esta disciplina que, como sus rutinas físicas y mentales, es capaz de retorcerse hasta amoldarse y encajar en nuevas culturas y personas de diferente índole.

Primeros indicios del Yoga:

Se tiene conocimiento del Yoga desde tiempos inmemoriales y es imposible actualmente datar el inicio o aparición de esta doctrina – uso la palabra doctrina puesto que en sus inicios estaba estrechamente vinculada a la mitología de la cultura originada en el Valle del indo previa al hinduismo y tenía una clara connotación religiosa -. Sin embargo, sí que podemos ir haciéndonos una idea de su antigüedad a través de los descubrimientos arqueológicos que Sir Jhon Marshall efectúa al descubrir las ruinas de la ciudad de Mohenjo-Daro en 1920. Sir Jhon encontró entre otros objetos un sello con figuras grabadas sobre el cual llegó a proponer varias hipótesis que de nuevo representan la dualidad entre la espiritualidad y el físico del que hace gala el Yoga. Su descubrimiento además colocó en la historia una civilización conocida a partir de entonces como la cultura del valle del Indo datada entre el periodo 3300 A.C y el 1.300 A.C (Edad de Bronce).

Dos de dichas interpretaciones apuntaban al dios hinduista Shiva en diferentes formas, entre ellas su forma de señor de las bestias “Pashupati” (nombre que finalmente se dió al sello descubierto). Otra de sus interpretaciones apuntaban directamente a la postura de la figura, que se hallaba sentada con las piernas cruzadas y que el arqueólogo asoció a una postura de Yoga.

Si esta última interpretación se confirmara, estaríamos hablando de que ya se tenía conocimiento del Yoga hace la friolera de 35 siglos y que estaba íntimamente ligado al panteón de la cultura del valle del Indo.

Los Vedas

Encontramos referencias escritas en siglos posteriores (II milenio A.C) ya en los “vedas” (“conocimiento” en sanscrito), los 4 textos más antiguos de la literatura india y correspondientes a la religión “vedica” previa al hinduismo y la base de la cultura del valle del indo. El «Rigveda» y el «Atharvaveda» ya mencionan conceptos referentes al Yoga tales como las técnicas de respiración y los canales psíquicos o  “chakras”.

Posteriormente se escribirían los Upanishads donde el Yoga es definido como una idea de “unión” gracias a la cual se llega al conocimiento del “ser”. Y explican la relación entre el ser transcendental (atman) y la realidad última (brahman). También describen la regulación de la respiración o el Karma Yoga.

Cerca del 500 A.C aparece el Canto del Señor o Bhagavad-Gita. En el interior de estos escritos encontramos un poema épico que describe las 4 ramas principales del yoga: Karma Yoga (yoga de la acción), Bhakti Yoga (Yoga de la devoción), Jnana Yoga (Yoga del conocimiento) y por último el Rajna Yoga o Yoga real (Yoga de la interiorización).

Cercano ya al año 300 A.C Patanjali describe los 8 pasos del Yoga que llevan a la iluminación, conformando la frontera entre el Yoga pre-clásico y el Yoga clásico.

El yoga en la actualidad:

Hoy en día en occidente, la parte mas visual del yoga es el Hatha Yoga que describe asanas o posturas y está orientado al bienestar corporal e indicado por sus beneficios terapéuticos. Es un yoga que se caracteriza por la transición “suave” entre posturas o asanas que buscan el beneficio corporal manteniendo la concentración y el estado de meditación, así como controlar la respiración. Es una pequeña parte de toda la doctrina del Yoga, pero quizá más visual y más adaptada a una cultura universal.

En cualquier caso, la práctica de este tipo de Yoga se ha extendido como la pólvora en todo el mundo y ya sea en casa, en el trabajo o en cualquier centro donde se imparten clases de Yoga puedes acercarte un poquito a toda una filosofía de vida con mas de 3000 años de antigüedad y que sirvió de guía a toda una civilización que creció y prosperó bajo sus enseñanzas.

Si lo pensamos bien nos hace ser un poquito más humildes saber que aún hoy en día ejercemos una práctica que hace 35 siglos ya se utilizaba.